Al presentarse la falla, los pilotos consiguieron perder 27.000 pies de altura en tan solo cinco minutos, colocando la aeronave en posición para el aterrizaje de emergencia en Jeddah
Durante un vuelo de Saudia en ruta El Cairo (Egipto) - Abha (Arabia Saudita, el A320-200 sufrió una despresurización de la cabina, obligando a los pilotos a desviarse y buscar un aterrizaje en un lugar alterno, llegando finalmente de forma segura a Jeddah.
El incidente ocurrió el 5 de febrero, cuando el vuelo 322 de Saudia se dirigía desde El Cairo hasta Abha. Al momento de registrarse la falla de presión, el A320 se encontraba a 37.000 pies, ubicado a 15 millas náuticas al noroeste de Jeddah, por lo que se realizaron maniobras de descenso rápido para evitar problemas por la falta de oxígeno; los pilotos descendieron unos 27.000 pies en tan solo cinco minutos. El portal Simpleflying revela que la pérdida de altitud a este ritmo significó que la aeronave alcanzó velocidades de 5.400 pies por minuto, o 27 metros por segundo.
Una vez en una altitud segura, la aeronave se posicionó correctamente para un aterrizaje de emergencia en la pista 34C de Jeddah. Durante este tiempo que le tomó a los pilotos desviarse para aterrizar, la aerolínea envió otro A320-200 para reemplazar a la priem,ra aeronave (HZ-AS38), continuando con el recorrido hasta Abha y aterrizando a las 19:10 hora local, unas dos horas más tarde del tiempo estimado de llegada.
El avión de reemplazo estuvo preparado en un tiempo bastante aceptable, lo cual fue posible gracias a que Jeddah es una de los centros principales de Saudia. Por esta misma razón no hubo mayores problemas en la realización de los servicios pertinentes al A320 que presentó la falla, reanudando servicio el 6 de febrero, volando hacía Dawadmi y Medina sin ningún inconveniente
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